El desencuentro entre géneros ha sido una constante en la historia de la humanidad. También ha sido parte, en cierta medida, del avance de la civilización y el desarrollo social y cultural. Por más que se nos quiera hacer creer desde ciertos sectores, mujeres y hombres no estamos en guerra, si acaso somos víctimas de manipulaciones políticas y económicas.Desde una perspectiva biológica, antropológica y social, se impone dar un paso atrás y contemplar el problema desde una posición objetiva. Antes que mujeres y hombres somos seres humanos que estamos compartiendo el mundo, siendo conscientes de ello debemos trabajar juntos.Este no es un libro polémico ni pretende serlo, su objetivo es el entendimiento, sin hacer concesiones a posiciones dogmáticas ni a juicios irracionales.