Entrenamiento para siempre. Jurij AlschitzЧитать онлайн книгу.
del capítulo mexicano de una investigación que busca reunir en una obra editorial los ejercicios de entrenamiento actoral que actualmente se practican en el mundo del teatro, investigación que en inglés tiene el nombre de "World Theatre Training Library".
Tras varias entrevistas y reuniones con artistas teatrales mexicanos y concluidas las tareas de esta etapa del magno proyecto de investigación, surge entre nosotros la inquietud de colaborar directamente en un proyecto pedagógico. En ese entonces más que una idea específica se trató de una declaración de intenciones que puso énfasis en la necesidad de ligar estrechamente la investigación con la práctica teatral.
El segundo eslabón de esta cadena se hace posible cuando Akt-Zent propone al cut asociarse para participar en una convocatoria internacional abierta por el Programa Cultural de la Comisión Europea. La idea es llevar a cabo en México un proyecto pedagógico que se propone indagar y desarrollar métodos de entrenamiento teatral para una práctica pedagógica innovadora. El nombre del curso con aspiración a maestría es "El nuevo rostro del maestro de actuación" o "The new face of acting teacher". El CUT acepta esta propuesta y el proyecto resulta seleccionado para desarrollarse a lo largo de dos años.
Este proyecto común hizo posible la incorporación de nuevos y valiosos aliados: el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes sumó sus recursos económicos a los de la Coordinación de Difusión Cultural de la unam para cubrir el costo financiero de este proyecto pedagógico en México. Asimismo, el Colegio de Literatura Dramática y Teatro de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM y la Escuela Nacional de Arte Teatral del Instituto Nacional de Bellas Artes se integraron al proyecto.
Los cursos iniciaron en agosto de 2012 y culminarán en marzo de 2014. Han contado con la participación de profesores de actuación de escuelas profesionales de teatro de 10 países. La mayoría son mexicanos, pero también participan profesores de Brasil, Colombia, Estados Unidos, Rusia, Alemania, Italia, Lituania, Polonia y Finlandia. Se trata de una experiencia a todas luces enriquecedora y que estamos seguros rendirá importantes frutos en el futuro inmediato.
Durante el desarrollo del curso, el doctor Jurij Alschitz y Christine Schmalor, cofundadora de Akt-Zent, fueron invitados por la Cátedra Ingmar Bergman en Cine y Teatro a dar sendas conferencias magistrales en el marco de las actividades de la cátedra, con lo que pudimos agregar un eslabón más a este encadenamiento de sucesos.
Esta etapa de encuentros se cierra con el acuerdo de la Cátedra Ingmar Bergman en Cine y Teatro, la Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial y el Centro Universitario de Teatro con el doctor Jurij Alschitz para la traducción y publicación de su libro Training Forever. Pensamos que este último eslabón de la cadena cierra un ciclo de colaboraciones que integran una importante aportación al estudio y la pedagogía de las artes escénicas. También constituirá una invitación a enriquecer la reflexión, la investigación y el debate sobre este maravilloso arte del presente que es el teatro.
Mario Espinosa
"Hola, Tolya. Te recuerdo mi solicitud de que escribas la introducción de mi libro sobre el entrenamiento. Espero que todavía recuerdes qué tormentosos resultaban los ejercicios para los actores. En resumen, haz el esfuerzo y escribe algo sobre el papel del entrenamiento en el teatro."
Fragmento de la carta de Jurij Alschitz a Anatoli Vasiliev
Un apunte sobre el papel
del entrenamiento en el teatro
El entrenamiento es aburrido, ¡no pienses en alegría!
El entrenamiento es repugnante, ¡ve a la plaza a comer un helado!
El entrenamiento es emocionante al principio, pero después es una privación de la libertad durante tres años, tres horas cada día; aunque puedes escaparte del castigo los fines de semana y ¡mandar a todos al diablo! El entrenamiento implica concentrarse, no distraerse. El maestro da una serie de instrucciones: "escuchen y aprendan", o más sencillo: "tóquense, no se toquen, salten, den volteretas; escuchen a través de la ventana abierta, pero observen la vela". Y, ¿qué hay atrás de la ventana? Un clima maravilloso. Y entonces el entrenamiento se convierte en un largo tormento para adultos y niños. ¿Quién lo habrá inventado? Jurij Alschitz.
Y antes de Jurij Alschitz lo inventó Butkevich Mijaíl Mijailovich, y previamente Butkevich y Skorik Vasili Ivanovich estudiaban los ejercicios; todos inventaron un poco. Antes Grotowski lo hizo y la palabra mágica entrenamiento se dispersó por el mundo. El primero fue Stanislavski K. S., sólo que él los llamaba ejercicios y bosquejos, mientras que Mijaíl Chéjov los denominó improvisaciones y Meyerhold, biomecánica. Yo mismo hasta la fecha practico el entrenamiento, pero lo llamo técnica verbal. Me gusta que el papel del personaje se prepare, de manera que el entrenamiento sea parte de los ensayos, sea parte del papel mismo. Una gran familia de conceptos.
Cuando un bebé deja de orinarse en los pañales, su madre lo entrena para su vida adulta: lo ayuda a desarrollar su atención y concentración, a enfocar su mirada, le enseña a pararse, a dar volteretas, a que reaccione de diferentes formas a una voz, a un sonido alegre, a uno triste; o tal vez le dé un muñeco igual a él y le diga: "¡Juega, hijo, no estés triste!"
Y así, desde la infancia se nos enseña el juego sin preocupaciones, pero los años van de prisa, nuestra juventud pasa rápido y no hay forma de regresar a ella.
Regresar al inicio. El entrenamiento es el regreso al inicio, la educación de la niñez en un cuerpo envejecido; el despertar del alma: hay que relajar los meñiques de las manos, si no, uno no podrá interpretar a Otelo en la vejez, ¡y lo que realmente se conseguirá será asfixiar a Desdémona con una cobija de madera!
El entrenamiento no es para tres años, sino para toda la vida.
Tienen ustedes frente a sí el libro Entrenamiento para siempre, que contiene la experiencia de mi alumno, el director de escena y pedagogo teatral, Jurij Alschitz. Hace casi 20 años lo invité a mi curso de pedagogía teatral y me alegro de haberlo hecho. Hemos recorrido juntos el camino desde Moscú a Oriente y Occidente. Ahora estamos separados: él se encuentra en Berlín, yo en París, pero las clases de entrenamiento, de donde salimos juntos con la obra Seis personajes en busca de autor, nos siguen vinculando hasta el presente.
Que se involucre en nuestra compañía todo aquel que tenga curiosidad por adquirir conocimientos teatrales, un arte vivo que no se detiene por narcisista ante ningún aparador, sino que, al seguir cambiando, sigue siendo él mismo: un teatro artístico.
Anatoli Vasiliev
Buenos días
Toda mi vida la he dedicado al arte teatral: de joven trabajé como director de escena; algún tiempo actué y todavía realizo puestas en escena, aunque no con tanta frecuencia. Tengo un cuarto de siglo dando conferencias, llevando a cabo entrenamientos actorales, dedicándome a investigaciones escénicas, escribiendo libros, impartiendo clases. Soy un pedagogo teatral. Desde hace casi 25 años me apasiona la pedagogía teatral. Es un tema que me entusiasma, lo encuentro interesante y nunca me aburre, ya que durante las clases y los entrenamientos continuamente descubro nuevos conocimientos sobre el teatro, sobre mi profesión, a la que considero la más importante y la más necesaria. Así vivo desde hace tiempo. Con cada año que pasa tengo la seguridad de que la pedagogía es el mejor y, tal vez, el único islote del teatro donde uno todavía puede conservar su yo artístico, y no perder la imagen de su teatro.
Éste es el libro del pedagogo, se le podría llamar "la clase del pedagogo", la clase de entrenamiento actoral. Contiene muchas tareas prácticas y algunos de mis puntos de vista sobre el teatro, la pedagogía teatral y, especialmente, el entrenamiento teatral. Soy un maximalista. Considero que el entrenamiento para el pedagogo no es solamente el instrumento más importante de su profesión, sino el fundamento básico de su metodología, de su estética, ética y filosofía. Sin una orientación