Lecciones de compromiso. Люси МонроЧитать онлайн книгу.
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28001 Madrid
© 2007 Lucy Monroe
© 2021 Harlequin Ibérica, una división de HarperCollins Ibérica, S.A.
Lecciones de compromiso, n.º 307 - enero 2021
Título original: What the Rancher Wants...
Publicada originalmente por Harlequin Enterprises, Ltd.
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Esta edición ha sido publicada con autorización de Harlequin Books S.A.
Esta es una obra de ficción. Nombres, caracteres, lugares, y situaciones son producto de la imaginación del autor o son utilizados ficticiamente, y cualquier parecido con personas, vivas o muertas, establecimientos de negocios (comerciales), hechos o situaciones son pura coincidencia.
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I.S.B.N.: 978-84-1375-194-8
Conversión ebook: MT Color & Diseño, S.L.
Índice
A mis hijos…
Vuestro apoyo lo significa todo para mí.
Estoy muy orgullosa de vosotros por haberos convertido en unas maravillosas personas.
Capítulo 1
Carlene Daniels aparcó el coche en el vado, delante de la casa más imponente que había visto en su vida. Al ser de la zona petrolera de Texas había visto muchas, por no mencionar las mansiones construidas por millonarios famosos que buscaban algo de intimidad durante las vacaciones.
Aquella casa de tres plantas, con paredes de estuco y estilo colonial, relucía inmaculada a la luz del sol; el techo de teja y los detalles de hierro forjado le daban un aire más elegante que histórico. Carlene se preguntaba quién viviría allí, porque el anuncio no daba información sobre la familia para la que iba a trabajar.
Aunque Sunshine Springs no era un hervidero de oportunidades laborales, y menos para una ex maestra convertida en camarera de un bar de copas, había llegado el momento de dejar de ocultarse tras las minifaldas ceñidas y el trabajo en el bar. Lo había comprendido después de la experiencia con Grant Strickland.
Se había marchado de Texas dolida y decidida a dejar atrás para siempre su antigua vida. Cuando, al llegar a la ciudad, sólo se le había presentado la oportunidad de ser camarera, la había aceptado porque no le recordaría en absoluto su trabajo ni a los niños que tanto quería. Pero el cambio de ambiente no la había hecho olvidar, y quería recuperar su vida.
Bajó un poco las ventanillas y puso un protector tras el parabrisas para evitar que el sol convirtiera el coche en un horno, antes de apearse para llamar a la puerta. Abrió la verja de hierro, entró en la propiedad y llamó al timbre. Esperó unos minutos y, al ver que no contestaban, volvió a llamar. A fin de cuentas, habían puesto un anuncio pidiendo un ama de llaves. Si no habían contestado, sería porque no habían oído el timbre.
En aquel momento se abrió la puerta.
–¿A qué viene tanta prisa?
La voz ronca y masculina que había hecho la pregunta la tomó por sorpresa. Aquel hombre era absolutamente exquisito. Pelo negro, ojos azul cobalto y un cuerpo alto y musculoso.
–Eh… –balbuceó ella.
Los ojos azules de mirada penetrante la recorrieron de los pies a la cabeza y de la cabeza a los pies, provocando que se estremeciera. Carlene no se lo podía creer. Su intención había sido que viera a la mujer que había sido en otra época, antes de aceptar el puesto de camarera en el Dry Gulch. Una época en que la ropa y la actitud reflejaban cómo era interiormente.
En vez de los atuendos provocativos que usaba en el bar, se había puesto una falda vaquera, una camisa blanca holgada y sandalias bajas. Después de meses de usar tacones de aguja para añadir centímetros a su baja estatura, se sentía casi en zapatillas.
La única concesión que había hecho a su habitual aspecto llamativo era el cinturón de plata y turquesas. Apenas se había maquillado, y hasta se había hecho un moño para recoger los rizos que solía llevar sueltos. Parecía exactamente lo que quería parecer: una buena