Universidad y Sociedad: Historia y pervivencias. AAVVЧитать онлайн книгу.
en África fue el deterioro del status social de la mujer, con la introducción de los nuevos modelos económicos de producción y la acentuación de la dependencia jurídica y material frente al hombre, especialmente al marido.
En este trabajo pretendemos ofrecer una primera aproximación a la historia reciente de la mujer africana en el entorno universitario congoleño, a través de testimonios y de diversas entrevistas realizadas.
ESTUDIOS SOBRE MUJERES
La mujer fue excluida de la mayor parte de las actividades introducidas o intensificadas por el proceso de dominación del colonialismo, como fue la educación y, por tanto, de ámbitos profesionales como el derecho o la medicina. La consecuencia inmediata será la escasa representación femenina en la nueva estructura política colonial.7 El fin de la segunda guerra mundial va a suponer la revisión de los ordenamientos jurídicos de muchos países, con el objetivo de eliminar las disposiciones discriminatorias e implementar aquellas que fomenten la igualdad entre hombres y mujeres, especialmente en la década de los setenta. Sin embargo, en general, como señala Encarnación Fernández, el principal obstáculo no reside tanto en la igualdad jurídica como en el de la igualdad de facto.8 Por otra parte, el concepto de género conlleva:
… un proceso histórico relacionado con la construcción de un campo científico en el que subyacen las relaciones entre hombres y mujeres, signadas por el poder hegemónico de los primeros y la subordinación de ellas …9
No pretendemos encajar una realidad tan compleja y diferenciada en los marcos teóricos construidos desde occidente, entendiendo que los procesos históricos pueden ser variados y diferentes en función de su localización geográfica.10 En efecto, el concepto de género es de orden sociológico, constituye una categorización socialmente construida para identificar los roles diferentes de los hombres y de las mujeres en las sociedades, en función de valores culturales, de nivel de desarrollo o de otros factores. Las relaciones de género entre el hombre y la mujer pueden ser relaciones de poder jerárquico, de familia, de mercado… Desde el momento que esas relaciones se refieren a una construcción social, éstas se caracterizan por una evolución en el tiempo, una diferenciación según las sociedades y una dificultad de generalización.11
Pues bien, a raíz de la tesis doctoral de Eva María Jurado –defendida en la universidad de Valencia en 2014– sobre la universidad de Kinshasa, fundada en 1954 como universidad Lovanium, decidimos abordar la posición de las mujeres en la universidad en esta parte de África. A comienzos de los años 60 aparecerán las primeras matrículas de mujeres. Al principio se incorporan a las escuelas de maestras, de enfermería, y las primeras mujeres serán religiosas y extranjeras, belgas o nigerianas. Centrándonos en el tema de los estudios de género realizados sobre mujeres en la universidad, intentamos abordar este estudio en el momento actual, repasando su reciente historia en los dos últimos siglos. Los problemas en el Congo serán los de una sociedad, en general, patriarcal y conservadora, donde el rol de la mujer estará muy marcado en su papel de atender a la familia, y donde éste problema se trasladará también a la universidad.
En la historia reciente del país encontramos que desde época colonial, en el siglo XX, los programas de estudios, en todos los niveles, estarán claramente diferenciados para mujeres y hombres. Por otra parte, en la investigación realizada los problemas encontrados son: primero la falta de acceso a los libros de matrículas en los centros de estudios y estadísticas, la falta de archivos, siendo los que hay de difícil acceso y, por otra parte, la reticencia de las pocas mujeres universitarias o con estudios superiores a hablar de su situación. Por eso una forma de abordar el estudio de las mujeres y la universidad es a través de las fuentes orales, de primera mano, que permitan recomponer su historia a través de entrevistas realizadas. Para ello elaboramos un protocolo previo de preguntas para centrar el tema sobre la universidad, que se irá perfilando poco a poco –por ejemplo, con preguntas como cuantas mujeres eran en el aula, cuantos hermanos con estudios tenían y qué lugar ocupaban en la familia…, con un protocolo, claro está, adecuado a la situación allí vivida– y que contestaran cuestiones sobre: su origen geográfico y social, relaciones familiares, vinculación con instituciones eclesiásticas o participación en la política… La finalidad es ver su trayectoria académica y profesional, así como comprobar su percepción como mujeres de la universidad que vivieron y viven.12
Por una parte, encontramos que no hay muchas mujeres con tesis doctorales, por lo caro de los estudios de tercer ciclo, las largas distancias para acceder a la universidad, problemas familiares… Por lo que hemos tenido que bajar el escalón a aquellas con estudios superiores o técnicos, enfermería, ayudantes, jefas de trabajos… Por otra parte, como ya hemos mencionado, la dificultad en encontrar mujeres que quisieran contar su experiencia. Nuestra idea sería poder hacer un estudio comparativo con otras universidades, como las españolas o mexicanas…13
En esta parte de África observamos algunas características comunes que ya adelantamos y sobre las que volveremos después:
– una escasez de mujeres en el tercer ciclo de doctorado y que ocupen cargos académicos
– para conseguir realizar estudios hay dos factores muy importantes a tener en cuenta: los antecedentes familiares con estudios del padre o abuelo… El vínculo familiar, social y económico es muy importante, ya que se trata de una élite reducida. Por otra parte, la vinculación a los estudios viene dada a través de la iglesia, ya sea católica o protestante, a través de la pertenencia a órdenes religiosas de las mujeres.
Como se ha comentado, la mayoría de mujeres abandonan los estudios para cuidar a la familia…, o porque los estudios resultan muy caros, no hay sistemas de ayudas o becas, y por problemas geográficos de largas distancias con la universidad. En las mujeres que realizan estudios encontramos que prima el aspecto de la cercanía geográfica, la buena posición social y étnica dominante, que estarán también vinculados con sus trayectorias profesionales. Veremos qué, al final, una vez se posicionan estarán en igualdad de condiciones que el hombre –en la política, en la universidad, en la ciencia, su percepción es que es la misma que la de los hombres–. La diferencia radica en el número, es cuantitativa. Por otra parte, el mayor número de alumnas depende de si se trata de una universidad de provincias, mientras que en zonas rurales será menor.14 En la universidad pública de Kinshasa hay igualdad de mujeres y hombres, estará más equilibrado el número de hombres y mujeres. Pero en todas estas universidades habrá una actitud más pasiva de las mujeres frente a los hombres en las aulas. Presentamos algunos testimonios concretos de mujeres, con antecedentes familiares o vinculación eclesiástica para acceder a los estudios junto con la historia universitaria de este país. Antes repasaremos los antecedentes de la historia reciente de la universidad en el Congo.
ORGANIZACIÓN DE LA ENSEÑANZA EN EL CONGO ANTES DE LA REFORMA DE 1948
El nacimiento de la escuela occidental en el Congo es consecutivo a la doble evangelización que conoció el país, la primera en el siglo XV y la segunda a finales del XIX. Durante este segundo periodo, la formación oral de carácter rudimentario impartida por misioneros nativos es sustituida, con el tiempo y las necesidades de la iglesia, el estado y la administración pública, por un verdadero sistema escolar. Sin embargo, fue necesario hacer frente a la resistencia de la población indígena contraria a la penetración cultural europea en general y especialmente a la idea de someter a los jóvenes al aprendizaje de lo que denominaban les choses des blancs.15
La tarea de educar a los nativos –secundaria en relación a los intereses de penetración de la Cuenca del Congo–, se dejó en manos de la iglesia, a quien los poderes públicos concedieron el monopolio de la educación otorgándole facilidades y la libertad de organizar escuelas, en la creencia que el cristianismo, y en particular el catolicismo, basado en la autoridad, era capaz de cambiar la mentalidad indígena y de inspirar un espíritu patriótico y de lealtad a Bélgica.16 De esta manera, aprovechando la primera empresa civilizadora y de evangelización, la iglesia fue implantando poco a poco un sistema escolar de enseñanza primaria y post-primaria, cuyo objetivo obedecía a la necesidad de formar en aquellas profesiones de carácter auxiliar. Así aparecen las primeras escuelas de misiones y las colonias escolares.