Tres flores de invierno. Sarah MorganЧитать онлайн книгу.
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Editado por Harlequin Ibérica.
Una división de HarperCollins Ibérica, S.A.
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28001 Madrid
© 2018 Sarah Morgan
© 2020 Harlequin Ibérica, una división de HarperCollins Ibérica, S.A.
Tres flores de invierno, n.º 268 - octubre 2020
Título original: The Christmas Sisters
Publicada originalmente por HQN™ Books
Traducido por Ángeles Aragón
Todos los derechos están reservados incluidos los de reproducción, total o parcial.
Esta edición ha sido publicada con autorización de Harlequin Books S.A.
Esta es una obra de ficción. Nombres, caracteres, lugares, y situaciones son producto de la imaginación del autor o son utilizados ficticiamente, y cualquier parecido con personas, vivas o muertas, establecimientos de negocios (comerciales), hechos o situaciones son pura coincidencia.
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Imagen de cubierta utilizada con permiso de Harlequin Enterprises Limited.
Todos los derechos están reservados.
I.S.B.N.: 978-84-1348-657-4
Conversión ebook: MT Color & Diseño, S.L.
Índice
A la maravillosa Lisa Milton, con cariño y agradecimiento.
La vida está tan estructurada que un suceso solo no puede cumplir todas las expectativas, y no lo hace.
Charlotte Brontë
Capítulo 1
Suzanne
Hay aniversarios buenos y aniversarios malos. Aquel era uno malo y Suzanne eligió marcar el momento con una pesadilla.
Como siempre, estaba enterrada, con el cuerpo inmóvil, y atrapada bajo un peso tan fuerte como el cemento. Tenía nieve en la boca, en la nariz y en los oídos. La fuerza y la presión la aplastaban. ¿A qué profundidad estaba? ¿Dónde era arriba y dónde abajo? ¿Iría alguien a buscarla?
Intentó gritar, pero no le salió nada, nada…
—Suzanne…
La llamaban. No podía contestar. No podía moverse. No podía respirar. Tenía una opresión fuerte en el pecho.
—¡Suzanne!
La voz le llegó a través del pánico y la oscuridad.
—Estás soñando.
Suzanne sintió un contacto en el hombro y el gesto la sacó de la tumba congelada y la devolvió a la realidad. Se incorporó sentada con la mano en la garganta, luchando por respirar.
—Todo va bien —dijo la voz—. Tranquila,